Luego del sufrido triunfo por los cuartos de final de la Copa del Mundo, los zapalinos se apostaron en las principales calles del centro de la ciudad para celebrar un hecho que no se daba hace 24 años: el acceso a semifinales.

El gol de Higuaín a los 8 minutos desató la locura en cada rincón de nuestro país, y Zapala no fue la excepción, donde una vez que finalizó el encuentro se comenzaron a oír detonaciones de fuegos artificiales, bocinazos y todo tipo de celebraciones.

El centro fue una vez más el lugar elegido para ser el sector donde los hinchas saltan, cantan y expresan su felicidad.

Una verdadera multitud de diferentes edades fue la que le puso calor a la fría tarde de sábado.