“En principio, lo que hemos logrado en esta audiencia es una manifestación de compromiso de ambas empresas de que se respete la fuente de trabajo de las más de 1.000 personas, quienes se mantenían en una incertidumbre sobre su futuro laboral”, sostuvo la abogada patrocinante de los empleados, Natalia Hormazábal.
El coordinador de la Subsecretaría de Trabajo, Jorge Figueroa, señaló que se trató de una audiencia en respuesta a la solicitud que realizaron los trabajadores del supermercado el pasado viernes.
Sobre la sede de Trabajo en la calle Mendoza casi esquina Talero, empleados con ropa de la firma de Neuquén, Allen, Cinco Saltos y Zapala se acercaron a sumar su apoyo, mientras se llevaba adelante la reunión en la que, según indicaron, el único ausente fue el representante del Sindicato de Comercio.
Figueroa dijo que, como los empleados no contaban con ningún tipo de información sobre las implicancias de la carta de interés comercial firmada por ambas empresas el pasado 6 de noviembre, tuvieron la posibilidad de conocer que “se compra la marca, el mobiliario y el compromiso del traspaso de todo el personal, incluido el jerárquico, tal como está enmarcado en el artículo 225 de la Ley de Contrato de Trabajo”.
“Eso significa que no habrá despidos; de todos modos, si llegara a surgir alguna inquietud en este tiempo, los trabajadores pueden plantear sus derechos”, agregó Figueroa.
Según el articulado, se respeta la antigüedad, la función y el sueldo.
Alejandro Tillería, uno de los delegados de la asamblea de trabajadores, señaló que la idea de este encuentro era cortar con la incertidumbre imperante entre los empleados, a partir de que se lanzó el rumor de la venta de la empresa regional.
“Hemos logrado una respuesta concreta fehaciente por escrito, que es lo que se ha representado en un acta de compromiso de las empresas de sostener la continuidad de los puestos de trabajo. No teníamos más que rumores y no estaba haciendo mal psicológicamente. Había mucha preocupación”.