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Abel Calzetta en Zapala

Tras presentarse en San Martín, hoy viernes, a las 23:30 estará en el bar Esmeralda de nuestra localidad.

Este guitarrista argentino que compartió escenarios con Pedro Aznar, Luis Salinas, León Gieco, Hugo y Osvaldo Fattoruso, Fabiana Cantilo y Chango Spasiuk, que vive la mayor parte del año en el madrileño barrio de Lavapies, y que supo disfrutar largamente la serenidad y las bellezas de San Martín de los Andes, regresa a la región para dar una serie de recitales con obras de su etapa instrumental y de la actual como compositor de canciones y voz líder.

Tras presentarse en San Martín, hoy viernes, a las 23:30 estará en el bar Esmeralda de Zapala ; el sábado 17 a la misma hora se presentará en Willie Dixon, de Roca, y el domingo 18 en Tótem bar, de Neuquén a las 22:30.

"A esta gira vengo tranquilo… Generalmente hago muchos más conciertos, pero acabo de rodar por Brasil con una banda, de terminar un disco nuevo y el agotamiento no me da para hacer demasiada cosa. Lo grabé en Madrid y salió hace una semana. Lo voy a mostrar un poco ahora y lo presentaré tranquilo en mi próxima venida, porque creo que voy a viajar con los músicos con los que lo registré. Se llama "Círculo"…"

-El círculo siempre es cerrado y en este caso, puede concluir una etapa.

-La cierra y abre otra. Es mi sexto trabajo discográfico y en él cambié bastante mi estilo porque siempre hice música instrumental y éste es de canciones con letras que canto yo. La producción es de Luca Frasca, un músico argentino que vive hace veinte años en Madrid y tocó con Pappo y cientos de colegas acá. Está muy bien producido y grabaron un montón de amigos, entre ellos Baltasar Comotto, Fernando Lupano, también argentinos que residen en la capital de España y músicos de otros países porque toco habitualmente con Cosmosoul, un quinteto con el visité Rusia el año pasado, Brasil, Londres y un montón de lugares. Yo tenía bastante parado mi proyecto solista y el tema de romper el estilo genera demasiada presión. Mi primer compacto (Los escultores del aire"), lo grabé en el 99 y desde entonces hasta el 2011, cuando edité "Tríptico sabático" en Madrid, hice instrumental. Por eso también trabajé con un productor…

-Alguien que le puso la oreja desde afuera.

-¡Claro! Y Lucas tiene una enorme cualidad para eso, además de tocar los teclados y los Hammond que usó cuando estuvo con Pappo. Imaginate que anduvo con él desde sus diecisiete años. "Círculo" tiene un enfoque particular de canción, lo grabé con gente re copada y posee un sonido bastante inglés pero marcadamente cercano al rock argentino que escuché siempre. Mi carrera la hice desde la guitarra, acá y en Europa. Así fui reconocido… Hace veinticinco años que vengo con la guitarrita. En este caso, no tiene un papel primordial, sino que prevalece mi voz y lo que canto. Son canciones cantadas… "Círculo" también marca un encuentro mío con los vinilos, con volver a escucharlos de otra manera. Cuando tenía quince, empecé haciendo canciones, letras, y fue una vuelta un poco- a eso por necesidad. Ahora, con mis cuarenta y dos años, no tengo más ganas de andar demostrando cuánto puedo tocar en la guitarra, aunque la siga amando y siendo guitarrista. Es una obra más madura. Para mí un disco tiene que relacionarse con lo que me va pasando. Lo aprendí de Luis Alberto (Spinetta) y siempre lo consideré como absoluto suyo, aparte de su música… Él fue mutando y generando obras a partir de lo que iba viviendo. Hay artistas que buscan una fórmula y sobre ella si funciona- siguen componiendo y trabajan. A mí, eso no me pasa y un compacto es como un pequeño diario personal. Entonces trato de plasmar lo que me sucede en el momento.

Momento que son años, porque entre que lo compongo, le doy vida y lo toco, pasa tres o cuatro. Después hay que darle un poco de ruedo hasta que dentro de dos, haga otro disco contando la historia de lo que ahora estoy viviendo.

-¿En alguno de sus temas aparece la distancia afectiva que tenés con Argentina o con Patagonia donde viviste y ahora volvés?

-Sí, pero más con el país, porque Patagonia fue una elección y uno de los lugares más lindos donde viví, al que volveré para quedarme un tiempo largo. Se relaciona con lo que mamé de chico. Vengo del rock y es a lo que más me acerqué en "Círculo", después de dar vueltas con la fusión, con el jazz. Tiene que ver con el rock argentino, totalmente… Mis pilares son Luis Alberto, García... Con ellos crecí. Mi idea fue hacer algo, dentro de lo que se puede ser, original… Decía (Igor) Stravinski que no es buen compositor quien copia, sino el que roba bien.

FACE: Así se titula una de las canciones de "Círculo". Habla de Facebook a tope, explica el guitarrista que nos visita. "La compuse un día que me quedé tonto en ese sitio, salí corriendo al salón de mi casa y la vomité. Llegué al ensayo con mis amigos y se la mostré. Le empezamos a dar vueltas y quedó algo con lo que estoy súper contento. Se relaciona con el momento actual. Está todo bien con Internet, pero estamos un tanto atontados con eso.

-Es una tecnología que nos permite conectarnos instantáneamente con cualquiera en cualquier parte del mundo, pero comunicarnos es otra cosa.

-Es como dice (Diego) Capusotto, para incomunicarse. Sobre todo los más chicos… Nacieron con ella, nosotros, no, y espero que no caigan en esa porque se aíslan. Pero, con mi trabajo, no puedo estar afuera. Ya no funcionan las compañías discográficas y el Facebook lo uso para prensa...Hago un flyer (volante), lo publico, la gente lo comparte, puedo organizar un evento y eso es copado. Pero, por otro lado, te seca el cerebro. El otro día recordaba con un amigo que antes llegabas a casa, te ponías a leer un libro o a ver una película, ahora entrás y lo primero es abrir la compu para ver qué pasa. Otra realidad, virtual, pero realidad al fin. Re loco y bastante pesado.

-Como contrapartida la música necesita del otro, del circuito de comunicación cara a cara.

-Sí…Por eso te hablaba de mi vuelta a escuchar vinilos, no solamente por el sonido, sino también para encontrarme con lo que quiere decir un artista a la hora de grabarlo. Podés tener una carpeta en la computadora o en el iPod, con cuatro mil temas en mp3, pero es como ver una peli en el cine al que vas especialmente y te concentrás; o en tu casa, donde podés pararla, ir a la heladera a buscar algo para tomar o comer. Por otra parte, con semejante archivo, nunca disfrutás un disco entero, saltás de un tema a otro. Cuando éramos pibes, lo hacíamos, conocíamos la letra, la tapa. Para mí, lo importante es que te permite acercarte a lo que quiso expresar el tipo que lo compuso.

Fuente: diario Río Negro.

Autor: Sergio Garro

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