Policiales

Una pesadilla: una familia comerciante fue asaltada por delincuentes armados, que los encerraron y huyeron con 45 mil pesos

Según trascendió el hecho se produjo el domingo alrededor de las 9.30 cuando la víctima abrió su carnicería ubicada en Güemes y Colón. Encerraron al dueño en la cámara frigorífica y se alzaron con una suma de dinero cercana a los 45.000 pesos.

Una familia zapalina vivió una verdadera pesadilla. Fueron asaltados en su comercio por dos sujetos fuertemente armados, quienes los redujeron y se apoderaron de una fuerte suma de dinero y otros objetos de valor antes de emprender la huida. De inmediato, ingresaron dos sujetos de entre 30 y 35 años de edad, de aproximadamente 1.75 de estatura y delgados.

Con armas redujeron al carnicero, a quien ataron con precintos y dejaron encerrado en la cámara frigorífica del local. Luego, obligaron a su esposa a ir hasta el departamento que el matrimonio ocupaba en la parte alta del comercio. Allí, con fuertes amenazas e insultos pero sin aplicar violencia física, se apoderaron de una suma estimada en 45.000 pesos que el comerciante tenía destinado al pago de un cargamento de carne que debía recibir de forma inminente, una notebook, celulares y otros elemento de valor.

Instantes después se dieron a la fuga. Según se comentó el dueño, los delincuentes circulaban en una camioneta Kangoo modelo viejo de color blanco que era intensamente buscada por la policía. “Se está trabajando en la investigación del hecho, hasta aquí hemos solicitado algunos informes y otras pericias”, expresó el fiscal del caso, Marcelo Jofré.

Uno de los datos que llamó la atención de los investigadores fue que los autores del atraco actuaron a cara descubierta. “Es un detalle que no resulta habitual, esperamos dar prontamente con los autores del hecho a partir de algunas líneas que se están desarrollando”, añadió el fiscal, en diálogo con “Río Negro”. Más allá de la audacia demostrada por los delincuentes, los investigadores intentarán determinar si realizaron algún tipo de inteligencia previa para conocer los movimientos del local y saber si en la vivienda particular del comerciante se guardaba dinero u otros elementos de valor.

Otros comerciantes de la zona donde se produjo el robo habían denunciado hace tiempo la sustracción de elementos de sus locales. Sin embargo, nunca se había llegado a un extremo como el de este caso.

Fuente: diario RN.

Autor: Sergio Garro

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