La mercadería, distribuida en 48 bultos, fue descubierta por agentes de la patrulla móvil de la Barrera Zoofitosanitaria del Senasa en el ingreso a Senillosa, al efectuar controles de rutina en el vehículo.
Al constatar la infracción, sumado a que los huevos no respetaban las condiciones higiénico-sanitarias adecuadas, el personal de la patrulla móvil del Senasa dispuso su decomiso y el envío a destrucción en un establecimiento habilitado de la zona, en el marco de la Resolución 38/12 exMAGyP.
El traslado de este tipo de mercadería sin las condiciones adecuadas ni la documentación que avale su origen representa un riesgo para el consumidor, ante la posibilidad de que contenga la bacteria salmonella, causante de enfermedades transmitidas por alimentos conocidas como “intoxicación alimentaria”.
El transporte en vehículos habilitados y la documentación sanitaria que acompaña a cada producto de origen animal y/o vegetal transportado garantiza su aptitud para el consumo humano al avalar que ha sido elaborada, despachada y transportada con las condiciones higiénico-sanitarias adecuadas.
Guillermo Amerio, Supervisor Regional del Senasa, explicó en diálogo a LU5 AM600 que este tipo de maniobras se realizan específicamente para evadir impuestos. “Todos los impuestos que están evadiendo son sus ganancias, sin contar que compran la mercadería un 20% más barata”, explicó el funcionario.