En la húmeda tarde de sábado, Don Bosco puso primera en la Copa Neuquén, que encaró su segunda edición de la mano de Lifune. El rival de turno por el Grupo B era Deportivo Confluencia, un humilde club que tiene pocos años de vida.

El equipo zapalino salió a la cancha convencido de dejar las tres unidades en casa, e intentó hacerle sentir la presión a la visita con rápidas llegadas por las bandas.

A los 32 minutos de la primera parte, Adrián Cerda abrió el marcador para el conjunto local, que se iría con esa diferencia al descanso. Además de contar con un hombre de más por la expulsión de un jugador de la visita.

En el complemento se observó a un Don Bosco muy relajado, que sufrió cuando Lucero decretó el empate para Confluencia que a base de esfuerzo y buen estado físico complicaba por momentos al elenco local.

Pocos minutos después, Germán Saez batió nuevamente al arquero rival y adelantó a Don Bosco. Mientras que faltando poco para el cierre, el ingresado Méndez decretó el 3 a 1 definitivo.

La 7ª ganó 5 a 2 en el inicio de la jornada, y la Reserva triunfó por 2 a 0.