El auto conducido por Contreras, un Fiat Siena, derrapó sobre la banquina por motivos que se desconocen y terminó volcando para quedar depositado a varios metros de la cinta asfáltica.

La tragedia se desencadenó sobre la ruta provincial 46, unos cinco kilómetros después de la intersección con la ruta nacional 40. El vehículo, según los datos de la policía, circulaba con destino a Aluminé y el conductor viajaba solo.

No se pudo precisar si la víctima fatal llevaba puesto el cinturón de seguridad al momento de producirse el vuelco. Tampoco se conocía a ciencia cierta el motivo del accidente por lo cual las fuentes consultadas esperaban el resultado de las pericias desarrolladas en la escena del hecho. Este informe permitirá establecer la velocidad estimada a la cual circulaba el rodado entre otros datos claves para el avance de la investigación.

Las rutas del centro neuquino suelen ser de extrema peligrosidad en horario nocturno tanto por la presencia de animales como consecuencia de la falta de responsabilidad de sus dueños y la escasez de alambrados, aunque este no sería el desencadenante del vuelco, según los primeros indicios recolectados en el lugar por los investigadores.