La historia ocurrió en el interior neuquino. A través de un conocido, un joven de 21 años llamó al supuesto vendedor que dijo vivir en Zapala y acordaron reunirse el martes al mediodía en el centro de la localidad.

“Se encontraron ambas partes, luego firmaron el boleto de compraventa en un lugar público, pero no en el correcto”, explicó el comisario Juan Carlos Ibarra, de la Comisaría 48 de Zapala, que tomó intervención en el caso junto con la Fiscalía de esa ciudad.

Entusiasmado, el joven de Las Coloradas viajó 120 kilómetros hasta el centro geográfico de la provincia para comprar el cuatriciclo que disfrutaría durante las tardes de verano, al menos eso fantaseaba.

El vendedor lo citó en la esquina del Banco Nación, ubicado en Avenida San Martín al 400, desde donde se dirigieron hasta un lugar en el que compartieron una gaseosa y firmaron el boleto.

“Tras la firma, fueron hasta una casa en el barrio Plan V. El vendedor le pidió el dinero y le dijo al joven que lo espere mientras buscaba el cuatriciclo dentro de la casa”, comentó el comisario. Los minutos pasaban, pero el vendedor no salía, por lo que el comprador le preguntó qué pasaba, a lo que le respondieron que no podían abrir el portón.

Media hora después, llegó a la vivienda un hombre que, sorprendido ante la presencia del joven en la vereda, le preguntó si necesitaba algo. “Cuando le dijeron que allí no vivía nadie con ese nombre, se da cuenta de que lo habían estafado”, aseguró el comisario Ibarra, quien aclaró que la víctima entregó la suma de 24.000 pesos.

“Les decimos que los boletos de compraventa los hagan ante un escribano que certifique la transacción y que sea los días de semana. Incluso deben llevar a verificar el vehículo para comprobar que no tenga un pedido de secuestro por robo”, detalló el comisario a modo de consejo a la población.

Fuente: LM Neuquén.