En medio de estos cambios, también aparecen renovadas formas de delitos, acosos y abusos, todos tecnológicos. Y para ello es fundamental estar atentos y prevenidos. En tal sentido, la familia cumple un rol clave.
La denuncia realizada por el padre de una adolescente de Cutral Co sobre las amenazas recibidas en el teléfono celular por el viral “juego del Momo” despertó esas alertas. Las mismas que ya se habían encendido días atrás por la triste muerte de un niño en Zapala, aunque la versión que lo relacionaba fue descartada de plano.
El polémico juego que se viraliza por Whatsapp y por el que los jóvenes pueden recibir fotos macabras y amenazas de muerte a los integrantes de su familia, es una preocupación y un misterio en todo el mundo.
Muchos los tomarán en broma pero quién sabe cuál es el nivel de vulnerabilidad de los más jóvenes en tiempos en que la imagen, la empatía que causan los posteos en las redes y la integración a grupos sociales son determinantes para las nuevas generaciones.
Y ahí, los padres son una pieza fundamental para saber qué ocurre y si han recibido alguna amenaza o acoso a través de estos virales y de las redes.
También somos los medios para alertar y prevenir estas situaciones, como las autoridades para adoptar programas, principalmente en los colegios.
Martín Pedoni.
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