Pasadas las 3 de la tarde de ayer, sobre la ruta 160, una aparente brusca maniobra del chofer de un colectivo que trasladaba al contingente, generó que el vehículo vuelque en el interior de un desagüe a la vera del camino. Testigos dieron cuenta que el conductor del rodado habría intentado eludir una moto que se atravesó sobre la calzada.

Los primeros minutos posteriores al siniestro fueron de mucha tensión, ya que la desesperación se adueñó de quienes ocupaba el vehículo de transporte, todos oriundos de Cutral Co y Zapala, hacia donde regresaban el domingo en la siesta.

En ese escenario, varias ambulancias del Servicio de Emergencia Coordinado y otras instituciones se desplazaron hasta el lugar a efectos de evaluar quiénes necesitaban ser trasladados al hospital Schestakow. Fueron de acuerdo al parte brindado desde el nosocomio público- 13 personas las que sufrieron heridas de diversa consideración, entre ellas menores de 3, 6, 9, 10 y 14 años y el resto entre 18 y 61 años.

Respecto a los diagnósticos, la mayoría de las víctimas sufrió traumatismos, mientras que Juana Liuki (61) también padeció una fractura costal. Afortunadamente, todos los pacientes estaban fuera de peligro, confirmaron fuentes médicas a Diario San Rafael.

Desde el lugar del siniestro, uno de los ocupantes del colectivo habló con periodistas de Cañada Seca y señaló que “escuché un grito cuando el conductor quiso eludir al de la moto y fue en ese momento que se descontroló el colectivo”. Otro pasajero expresó que “venían tres personas en una moto de color rojo y para evitar atropellarlos, el chofer hizo una maniobra por la que terminamos en el desagüe. Afortunadamente estamos todos bien”.

Oficialmente no se supo ayer si el conductor de la moto a la que hicieron alusión los diferentes testigos quedó en el lugar del accidente o continuó su camino. Lo cierto es que su presencia resultó un incidente clave para entender los motivos del siniestro.