El primero de los efectivos en declarar en esta segunda jornada del juicio, previsto a desarrollarse por dos semanas, fue uno de los efectivos que estuvo presente en el operativo en el barrio Peñi Trapún. Cabe recordar que la teoría de la fiscalía señala que los seis acusados -José Luis Espinoza, Miguel Ángel Díaz, Walter Díaz, José Culliqueo, Elio Díaz y Elías Campos- iniciaron los disturbios en el barrio, motivo por el cual se convocó a la policía. Cuando arribaron los efectivos, el grupo los atacó con piedras y palos y, en ese marco, Elio Díaz habría efectuado el disparo que impactó en la cabeza de Nahuelcar y le provocó la muerte.

"El llamado era por una vivienda en construcción que habían incendiado, en calle Zapala al final. Contuvimos el lugar, vino la dotación de bomberos, los recibieron con piedras y después que terminamos con el conflicto ahí, de la vivienda de la familia Espinoza salió un grupo de masculinos que empezó a tirar piedras y elementos contundentes hacia el personal", reconstruyó el testigo, de apellido Torres. Dados los incidentes, los efectivos alentaron a los bomberos a retirarse y comenzaron a devolver las agresiones al grupo. En simultáneo, comenzaron a pedir refuerzos porque el lugar "estaba complicado".
"Ese día teníamos pocos efectivos, éramos cinco en el área. Una vez que se retiraron los bomberos, avancé por la calle Zapala, me acoplé al grupo de motoristas y mis compañeros que repelían la agresión. Al ver que teníamos una sola escopeta y ellos eran entre seis y siete, agarré la gomera", relató el efectivo.

Dos vecinas citadas al estrado también recordaron los incidentes de esa mañana y reconocieron puntualmente la presencia de dos de los acusados: José Luis Espinoza y Walter Díaz.

Torres también fue uno de los que aportó la primera hipótesis a la fiscalía respecto del tirador que disparó el proyectil que impactó a Nahuelcar, hipótesis que fue respaldada por las pericias realizadas sobre la trayectoria de disparo con posterioridad.

"Observé a un masculino sobre el paredón de la casa de los Espinoza; el masculino era cachetón, de estatura mediana, vestía remera blanca, pantalón arremangado tipo 3/4 y tenía un arma larga con una culata de madera", describió. En este sentido, el perito encargado de las tareas para estudiar la trayectoria del disparo ratificó la posición del tirador, que se encontraba a unos 68 metros de la víctima, y exhibió fotografías del operativo.

El médico encargado del procedimiento de autopsia sobre el cuerpo de la víctima informó que Nahuelcar falleció por la lesión encefálica generada por el proyectil, el cual le produjo una "muerte encefálica inmediata".

Otros efectivos y un perito relataron algunas de las diligencias realizadas en el marco de la investigación, una de las cuales dejó como resultado el secuestro de un arma larga que se halló "tirada" sobre un colchón en el patio de un domicilio contiguo a la vivienda de los Espinoza, la que se presume que sería el arma homicida.