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Clínica Huinca Lahuen: el lamento del pasado

El Dr. Nestor Zambelli, hizo publica una nota enviada al Gobernador, que hasta el momento no ha tenido respuesta. En la misma hace referencia a la salud neuquina y el cierre de la Clínica Huinca Lahuen.
Sergio Garro
Por Sergio Garro

Zapala, 13 de Marzo de 2013.
A:
Sr. Gobernador
Provincia del Neuquén
Dr. Jorge Augusto SAPAG.

De mi mayor consideración:
En 1981 Gabriel García Marquez publicaba su obra Crónica de una Muerte Anunciada, título que podríamos aplicar sin temor a equivocarnos a lo que está sucediendo con gran parte de la salud neuquina.

Hoy cerró uno de los establecimientos sanatoriales que atesora gran parte de la historia sanitaria de Zapala y uno de los de mayor antigüedad en la provincia: Clínica Huinca Lahuen. Pasaron por ella pacientes que manejaron y manejan la economía provincial, y profesionales que mucho realizaron por contribuir a que nuestra provincia lograra tener uno de los mejores sistemas de salud de América. Pero los tiempos cambian y se dejó de lado aquella utopía de ser los mejores ganando terreno la teoría de convertir el modelo en recaudar para utilizarlo con fines que no iban dedicados a la atención primaria de la salud. Lo financiero ganó a lo humanitario.

Alberto Falcioni, Norberto Kurchan, Jorge Giovanetti, Fausto Pelayes, José Soria, Pedro Soria, Emilio Martínez, María Elena de la Vega de Soria, Luis Darío de la Vega, Flavio Contreras, Susana Dellepiane, Lina Jemma, Gabriel Urquiza, Hugo Vallejos, Eugenio Gerlotti y muchos otros colegas dejaron mucho de sus vidas para lograr hacer realidad el sueño de construir un lugar donde los que aquejaban alguna dolencia pudieran buscar contención, refugio y solución. Y brindaron atención a personalidades como Cannan Sapag, Aureo Arellano, Elías Sapag, Miguel Espinosa, Amado Sapag, Dr. Osvaldo Pesqueira, Nefer Cardone, Alberto Zingoni, Atilio Cardone por nombrar algunos.
Sin lugar a dudas hubo errores internos, fallas en la evaluación de los cambios que venían pero lo que mas impacto causó fue la insostenible presión que las recesivas políticas implementadas desde el estado provincial (políticas que mucho se parecen a las que José Alfredo Martínez de Hoz implementó en 1976 en nuestro país) que fueron minando las posibilidades de brindar un servicio de salud como se merecen los habitantes de esta zona duramente castigada por las políticas provinciales.

No pago de prestaciones realizadas, pago de prestaciones con prolongados meses de demora, débitos irracionalmente realizados por cuestiones administrativas que nada tienen que ver con la salud, pago de las prestaciones de a cuenta gotas que hace casi imposible saber que es lo que se está
cobrando, imposición de nuevas reglas de juego que poco y nada aportan a la salud, negativa a reconocer valores razonables al trabajo realizado son solo algunas de las medidas que el ISSN tomó en contra de la salud neuquina. Sumado a ello la negativa a dialogar racionalmente y realizar una campaña continua en contra de los prestadores por parte de los funcionarios de turno. Nosotros, los prestadores, somos el perverso hecho maldito del sistema de salud según los funcionarios, pero el resultado es que los administradores van pasando y solamente dejan como logro que el ISSN y la salud neuquina está cada vez peor.

Lamentablemente no es esta la única actividad que sufre las consecuencias de estas perversas políticas. Vemos con enorme tristeza como se va muriendo la ciudad que lo vio nacer a usted sin que el estado provincial haga el menor intento de morigerar esto y, por el contrario, se sigue estimulando todos los días el desarrollo de la capital imitando el modelo agroexportador que los ingleses impusieron en el país en el afán de saquear al interior.

Hace 36 años que ejerzo la profesión en esta ciudad y puedo dar fe de la importante actividad minera, maderera, transportista porque veíamos en el consultorio pacientes de diversas ramas de la producción. Hoy vemos en un 80 % son empleados provinciales a los que le siguen PAMI, IOSE, OSECAC lo que demuestra que pasó en Zapala con la economía. Si tenemos una decisión provincial que nuestra ciudad sea ámbito casi exclusivo de empleados provinciales y al mismo tiempo tenemos una decisión provincial de no abonar como corresponde las prestaciones que se le brindan a los pacientes hemos conformado un coctail explosivo. O como vulgarmente se dice en la calle tenemos un incendio en Zapala y el gobierno provincial quiere apagarlo con nafta.

Afirmaba usted en los diarios regionales hace pocos días que no quería que los niños fueran rehenes de los docentes. Los prestadores y los pacientes tampoco queremos ser rehenes de una ineficaz administración que asumió en el ISSN diciendo “ha llegado la época de felicidad para los médicos”. Desde el único punto donde se puede estar de acuerdo con este concepto es que la ideología con la que venía era destruir el sistema de salud. De cualquier manera y más allá del éxito obtenido en este mandato solamente se podrán poner contentos los funcionarios. También me causa sorpresa su afirmación de llamar a dialogar en los conflictos que transita la provincia. Pero para dialogar hacen falta al menos dos partes porque si no es monólogo. Si a nosotros no nos reciben en el ISSN, usted nunca contestó nuestros pedidos sería importante que nos diga con quién dialogar.

Sr. Gobernador Jorge Sapag, Zapala lo vio nacer, lo vio ir a la escuela, su familia formó parte de los primeros pobladores. No sea usted el que termine firmando el certificado de defunción de Zapala en el año que cumple los 100 años de existencia. Como dice Discépolo no se deje encandilar por las luces de la gran ciudad y piense que gracias a Zapala usted hoy puede estar donde está. Bríndele a Zapala algo de todo lo que Zapala le brindó a usted.
En lo personal, me consta que muchos vecinos y profesionales estarían dispuestos a dialogar y encontrar juntos los caminos que nos lleven a superar esta situación de estancamiento y abandono de nuestra querida

Ciudad de Zapala. Comunidad que espera cumplir sus 100 años con alguna esperanza sobre la construcción de una sociedad más justa y equilibrada.
Quedando a su disposición y a la espera de una pronta respuesta dada la urgencia que invade a las 100 familias que trabajaban en Clínica Huinca Lahuen, saludo a usted con distinguida consideración.

Dr. Néstor Osvaldo Zambelli

Fuente: Radio Urbana.

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