La obra consta de dos esculturas que impactaran la vista de todas las personas que ingresen. Una de las piezas representa la figura de Don Jaime Francisco de Nevares con una altura de dos metros mientras que la segunda es un Pehuén (Araucaria araucana) de cuatro metros.

La elección de las figuras, tienen que ver en principio con el accionar de Nevares como obispo de la Diócesis de Neuquén, donde se centró en el ejercicio de la justicia y la defensa de los derechos constitucionales fundamentalmente de los pueblos indígenas.

En cuanto al Pehuén representa una de las especies milenarias y nativas más significativas de nuestra región, mereciendo el reconocimiento de la comunidad.

La tarea de ejecución de esta obra, fue encomendada al escultor Aldo Beroisa quien se destaca en el rubro por haber realizado otras como El Cristo de Cutral Có, y varios de los dinosaurios de Plaza Huincul.

El traslado de la misma estará a cargo del escultor para luego emplazarla en el pedestal mediante una grúa.

Fuente: Prensa Municipal.