"Este es un caso testigo, si nos condenan a nosotros irán por nuestros hermanos de toda la provincia que están imputados por defender sus tierras del avance de las petroleras", sostuvo a "Río Negro".

"La contaminación en nuestro territorio sigue más latente que nunca y nadie se acercó a ver cómo sufre nuestra gente", sostuvo, al tiempo que cargó contra la Justicia neuquina al señalar que "la misma fiscalía que hoy nos trae a juicio por defendernos es la que tiempo atrás archivó las denuncias que presentamos contra las petroleras por el ataque y las golpizas que recibimos".

Carol Soae enfrenta los cargos más graves, acusada por el delito de "homicidio en grado de tentativa". "Hay que interpretar el contexto en el que sucedió el hecho; estábamos conmocionados luego de sepultar a un bebé que murió por la contaminación y recibimos esta orden de desalojo", argumentó sobre la agresión que dejó lesiones gravísimas a Pelayes el 28 de diciembre de 2012, cuando la funcionaria se presentó en Portezuelo a notificar una orden judicial para que se habilite el paso a las maquinarias de la empresa Apache.

Ayer siguieron los testimonios en el juicio que conduce el juez de Cutral Co Raúl Aufranc y cuyo veredicto quedará en manos de un jurado integrado en un 50% por mapuches. Uno de los relatos más fuertes lo dio el hijo de Verónica Pelayes, quien tenía 18 años al momento del hecho y presenció la agresión. El joven complicó a Carol Soae al identificarla como la persona que se acercó hasta la ventanilla del vehículo que conducía su mamá para arrojar una piedra de gran tamaño que impactó en el rostro de la notificadora.